MARTES DE MUERTE

Cuando lo vi en el suelo el sábado, no le di importancia. "Vamos Puerta, deja de joder y levantate y anda", grité frente al televisor creyendome Jesucristo o algo peor.

Hoy no me lo creo, aún no me cabe en la cabeza. Es horrible.

No sé quien ha escrito la anterior entrada; de hecho, me ha sorprendido gratamente, pues creía que las cosas del Sevilla eran mi tarea (y las de Paco, pero a ese señor lo hago muy lejos, en ultramar, y supongo que allí, a estas horas, Puerta sigue resistiendo). Un video de los mejores momentos de Puerta pedían. Pues se pueden reducir a estas cortas imágenes, por varios motivos.

Primero, porque a partir de ese momento, cuando uno queria referirse a Puerta, lo hacía como "el Héroe de Schalke". Os pongo en situación: Sevilla - Schalke, empate a cero en el minuto 100 (10 de la prorroga), partido de vuelta de las semifinales de la UEFA, el partido que nos podía meter en nuestra primera final de la Historia. El Schalke era un equipo muy, pero que muy bien plantado, y la cosa parecía que iba a acabar en tragedia. Entonces Puerta recibe y sólo se le ocurre hacer ésto.



Enloquece el estadio. Yo estaba a muchos kilometros, escuchando el partido por la radio en la soledad de mi habitación (no lo retransmitían por la tele, no éramos importantes). Me levanté de la silla y cerré la puerta del cuarto para que ninguno de mis compañeros me vieran cómo lloraba y me temblaban las manos, supongo que por la tensión, supongo que porque las cosas por la radio adquieren mucha más intensidad porque no ves nada, no entiendes nada, sólo sabes que ha sido gol, gol, gol de Puerta, Puerta gol. Nada más. Y en realidad es lo único que importa.

Otro de los motivos por los que uno sus mejores momentos se pueden reducir a este corto video es precisamente por su corta edad. 22 añitos. Pero a pesar de ser un "chaval", lo peor de todo es que deja un hijo huérfano, en su mujer todavía embarazada de 7 meses.

También hay otros videos memorables, como cuando se meó a tres del BarÇa (ojito, incluido Puyol) en la final de la supercopa de Europa y erró ante Valdes por llegar forzado y chutar con su pierna menos buena.



Aún con todo, aún siendo un maldito deporte, no puedo dejar de sentir admiración por lo trágico y épico del asunto. Morir en el terreno de juego, luchando por el equipo en el que te criastes, por tu gente...no creo que haya un final más noble y romántico para un futbolista, cuando el futbol es tu vida. Y no me extrañaría que, de haber sabido lo que iba a ocurrir (y que ya lo debía intuir, pues había padecido desvanecimientos anteriormente), Puerta hubiera seguido jugando como siempre.

No sé qué mas decir porque personalmente no lo conocía (aunque en realidad, sí) y porque no se me dan bien las despedidas. "Hasta luego", supongo.

Y que espero que en el cielo tengan una larga banda izquierda.