Etoo'nto y el soft core

Los domingos son días duros. Días de soft core.

Los domingos, jornadas de moratones, sed y extrañas sensaciones, son especialmente propicios para disfrutar de una "guena" peli. Por eso, el pasado domingo Ángel, Bocas y un servidor fuimos al videoclú a por un buen filme. En cuestión de segundos quedamos atónitos e hipnotizados ante una estantería que aglutinaba "cine erótic-oh". Clásicos del cine erótico. Nunca antes habíamos cogido una peli deliberadamente "guarra" en el videoclú. El domingo fue el día.
Mientras repasabamos las sinopsis de los deuvedés en busca de una trama interesante, uno de los mejores futbolistas del mundo (capaz de maravillas como la que demuestra en la foto), Samuel Eto'o, llevaba a cabo un acto "soft core" en el Nou Camp. ¿Qué hizo? Se negó a entrar al campo para jugar sólo los cinco últimos minutos. Se negó ante su entrenador y sus compañeros. Muuuuuuyyyyyy soft core.
¿Qué es el soft core? En el mundo del cine se denomina así a todas esas pelis eróticas, violentas o directamente ofensivas, pero que no rebasan "esa última línea". Aquellas que lo hacen se englobarían dentro del "hard core" o porno. Pues bien, lo de Etoo'nto fue soft core. El gachó no se cago en medio del campo ni se la metió en la boca a Iniesta en un córner, pero rayó en la delgada línea que separa lo respetable y lo que no lo es.
Mientras Etoó volvía a liarla, Ángel me preguntaba (por supuesto a voz en grito), si prefería coger "SINFONÍA DE PLACER" (Jess Franco), "DELICIAS TURCAS" (Paul Verhoven) o "SALÓN KITTY" (Tinto Brass). Todos los presentes en el videoclub (y por ende sus novias, recordad que era domingo) ríen y nos miran insinuando: "putos cerdos, putos cerdos, putos cerdos...". Yo, pongo cara de adolescente con acné. Bocas sólo revolotea por el lugar.
Todavía recuerdo la sinopsis de SINFONÍA DE PLACER. "Tras una estancia fuera, una mujer regresa a su hogar. Al llegar, se encuentra con que su marido, que se encuentra algo trastornado y comparte una historia sexual con un jovencito deficiente. Ambos, marido y jovencito deficiente, han retenido a una monja a la que torturan y violan repetidamente. Ante tal panorama, nuestra protagonista se verá envuelta en una espiral de violencia, sexo y muerte". Apetecible ¿verdad?
Menos apetecible le parecía a Etoó saltar al campo. De hecho, no sólo no lo hizo sino que, posteriormente, cargó contra sus compañeros y su entrenador "en una espiral de violencia, sexo y muerte". Las declaraciones fueron lo más parecido al soft core que podemos disfrutar en el mundo del fúbol. Llamó "mala persona" a su entrenador. Habló de "Samuel Etoo" en tercera persona (algo muy soft core, jeje) y e incluso se metió con su colegui Ronaldinho, el que le convierte en el goleador que es. Eto'o es muy majo, como un niño, pero a veces peca de ingenuidad. El otro día, además, parecía tonto. Sus palabras rayaron el delito y la moralidad. Como las películas que mirabamos nosotros en el videoclú.


Finalmente nos decidimos por SUCCUBUS (NECRONOMICON), una película del gran Jess Franco. En ella, una mujer que trabaja en performances que simulan torturas y vejaciones varias en Berlín, es digamos "poseída" por una entidad etérea que le obliga a matar a sus amantes en la vida real. Más o menos. Escogimos una de las más serias y recatadas de la estantería, creedme. Os la recomiendo a todos. Pero tranquilos, la próxima cogeremos FALO CREST, ABERRACIONES SEXUALES DE UNA MUJER CASADA, PARAÍSO DE BESTIAS/INFIERNO DE MUJERES o LA NOCHE DE LOS SEXOS ABIERTOS.